Nuestros ojos son muy sensibles y están especialmente expuestos a todo tipo de agresiones, mucho más en una época en la que pasamos horas mirando dispositivos electrónicos, por trabajo o por ocio.
Por ello, proteger la salud ocular es fundamental, y hay que hacerlo desde muy pequeños e incluso aunque no haya síntomas de que la vista presenta algún problema.
Proteger adecuadamente los ojos
La radiación solar es muy agresiva y puede provocar daños severos en los ojos. En este sentido, se deben proteger tanto en invierno como en verano. Por supuesto, siempre con lentes homologados. Y también hay que proteger los ojos con lentes adecuadas en aquellos trabajos en los que haya riesgo de lesiones oculares o a la hora de practicar ciertos deportes
Cuidar la higiene ocular
Sobre todo en personas con tendencia a sufrir blefaritis, con ojo seco o que usen lentillas, una adecuada higiene con productos específicos es de vital importancia.
Lo ideal es llevar siempre un pequeño kit en el bolso para casos de emergencia, por ejemplo, para poder hidratar los ojos en lugares con calefacción alta.
Cuidado con las pantallas
El uso excesivo de pantallas incrementa el riesgo de padecer problemas oculares. Por eso, a la hora de trabajar o de disfrutar de esos momentos de ocio, conviene tener en cuenta algunas precauciones.
Por un lado, mantener los dispositivos a una distancia a adecuada para evitar la aparición de fatiga ocular. Así mismo, es imprescindible hacer pequeños descansos cada veinte minutos y enfocar la vista hacia puntos lejanos, es un ejercicio ocular muy útil.
Mejorar los hábitos de vida
Dejar de fumar, llevar una dieta equilibrada rica en ácidos grasos omega-3 y verduras, descansar lo suficiente por las noches y hacer algo de deporte es bueno para la salud en general, pero de modo muy particular lo es para nuestros ojos.
Otros consejos básicos
Además de los consejos anteriores, es importante seguir algunas otras recomendaciones para una buena salud ocular: no frotarse los ojos, evitar traumatismos oculares, mantener una buena iluminación a la hora de trabajar o de estudiar o cumplir con los tratamientos prescritos por el oftalmólogo son algunas de ellas.
Cuidar de la salud ocular es sencillo y no requiere de ningún esfuerzo. A cambio, nuestra visión se mantendrá en las mejores condiciones durante mucho más tiempo. No hay que olvidar que los ojos también envejecen y que muchos de los problemas que padecen son irreversibles.
Credito de imagen principal via: piqsels